Alteración del patrón de reclutamiento escapular

El proceso mediante el cual realizamos un movimiento o acción motora, que es procesado por nuestro cerebro y requiere la activación de ciertos grupos musculares, se conoce como patrón de reclutamiento. Para los pacientes, esto se refiere al conjunto de músculos que se activan para llevar a cabo una acción específica.

Cuando sufrimos una lesión, se producen ajustes en nuestro cuerpo. El cerebro, como el centro de control, intenta lograr el movimiento final, activando las estructuras necesarias, incluso si no deberían estar involucradas. Estas son lo que se llaman «compensaciones».

La manera en que los músculos intervienen, el momento en que se activan, la secuencia de activación y el papel que juega cada músculo dependen de un proceso de aprendizaje continuo, gestionado por nuestra corteza cerebral, en función de las demandas percibidas por nuestro sistema.

Un ejemplo de esto sería la elevación del brazo, en la que el músculo principal involucrado es el deltoides. Sin embargo, si hay una lesión en el hombro, este músculo puede no activarse adecuadamente y, en su lugar, se recluta el trapecio superior, lo que puede causar dolor cervical.

APRENDAMOS CON UN CASO PRÁCTICO

En este video, mostramos cómo realizar correctamente un ejercicio de remo (tracción de brazo, hombro y escápula) en una camilla, en posición prona. En este caso, el paciente tiende a sobreactivar el trapecio superior, lo que le provoca cefaleas y dolor cervical en su vida diaria.

En el video, se observa una activación deficiente del trapecio inferior en las primeras repeticiones, músculo que es clave para estabilizar la escápula y realizar el movimiento correctamente. La escápula se mueve de manera incorrecta, haciendo báscula externa y ascendiendo, debido a la activación excesiva de las fibras superiores del trapecio, cuando debería moverse hacia dentro y hacia abajo, con la ayuda de las fibras inferiores del trapecio.

En las repeticiones siguientes, nos enfocamos en activar las fibras inferiores del trapecio:

  • «Lleva la escápula hacia la línea media»
  • «Inclina el ángulo de la escápula hacia abajo y hacia adentro»
  • Acompañamos de estimulación táctil para que el paciente sienta la zona que debe activar.

Luego comparamos las diferencias en la ejecución.

CONCLUSIONES

El cuerpo se adapta constantemente a las situaciones y necesidades. El sistema nervioso busca reclutar las estructuras que considera necesarias para realizar un movimiento.

Cuando una estructura está lesionada, el cuerpo recurre a músculos cercanos o agonistas para compensar esta deficiencia.

Si, después de que la lesión se haya curado, no trabajamos en restaurar el patrón de reclutamiento original, el sistema neuromuscular puede adoptar esa compensación como un patrón «normal», y el cerebro continuará utilizándolo como válido para ejecutar los movimientos.

Como profesionales, debemos evaluar si estas adaptaciones son beneficiosas o no para cada caso específico.

Si tienes más dudas o quieres probar con nosotros a tratar una posible lesión, no dudas en ponerte en contacto con nosotros en info@centrovitalidade.com o llámanos al 630 56 16 65

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